lunes, 26 de octubre de 2009

Siervos del Altísimo: Fe que trasiende el tiempo


El paralítico de Betesda
Juan 5: 1-8

Un paralítico, un ángel, unas aguas... 38 años. Cuenta la Biblia que cada cierto tiempo descendía una ángel en un estanque y agitaba sus aguas. El primer enfermo en descender al estanque luego del movimiento de las aguas, sería sanado. Sin embargo el pobre paralítico nunca conseguía llegar a tiempo, siempre había uno más rápido que él. Su encuentro con Jesús no fue uno común. En otras historias de la Biblia vemos que suele ser el enfermo quien busca de Jesús para ser sanado. "¿Quieres ser sano?" "Levántate, toma tu lecho y anda." Este hombre se levantó tomó su lecho y anduvo.

A pesar de no saber que estaba frente al maestro, tuvo FE en aquel hombre que le ordenaba a levantarse. Solo FE alimentó este acto, pues después de 38 años, que un hombre le dijera que se levantara hubiese sido algo absurdo, pero la FE lo llevó a creer y dar por hecho su sanidad. La historia no termina ahí. este hombre continuó su vida, la Biblia no menciona un "gracias" solo dice que fue sanado en el día de reposo. Esto significaba que dicho día esta separado para hacer nada, ejecución trabajo alguno era violación a esta ley (sanar y cargar su propio lecho). El paralítico se topa con unos judíos y éstos le cuestionan el porqué de sus acciones, a esto el paralítico luego de haberse enterado que era Jesús quien le había sanado les informa a los judíos sobre ello.

¡Luego de ser sanado, delata a Jesús con los judíos! Este acto representa nuestra naturaleza misma. Solemos recibir lo que necesitamos de Jesús, bendiciones desde el momento en el que nos levantamos y luego andamos por ahí sin decir gracias y sin reflejar agradecimiento algo por tanta bondad y misericordia. Todo lo contrario, solemos confundir a los demás profesando ser cristianos y llevando un testimonio erróneo, ponemos por el suelo a Jesús con nuestras acciones y lo mas atónito es que Jesús nos sigue bendiciendo. Dejemos de ser como el paralítico, evitemos esta conducta... aprendamos a ser agradecidos de tan solo poder respirar y permitamos que la misericordia, gracia y gloria de Dios se refleje en nosotros y en nuestras vidas día tras día.

Por: Angélica Pérez

Siervos del Altísimo: Fe que trasiende el tiempo


La mujer del flujo de sangre
Marcos 5:21-34


La Biblia no nos dice mucho sobre ella, ni siquiera su nombre. Pero si nos dice lo que necesitamos saber para comprenderla. Una mujer, con una enfermedad de flujo de sangre; de acuerdo a las raíces culturales, era considerada impura, poca cosa e indigna de tan siquiera hablarle. Ahora, imagínese el corrompimiento físico, espiritual, social y emocional que esta mujer sufrió por 12 años. Sin dinero, ni hogar, sin cura y quizás con pocas ansias de vivir.
Por: Angélica Pérez

Al escuchar del maestro de ese magnífico sanador, un hombre que andaba por las calles de Jerusalén impactando vidas, perdonando personas e inclusive resucitando muertos. La fe de la mujer creció, imagino como al escuchar de Él seguramente pensó en la sanidad que podría traer a su vida misma. "Si tan solo tocare el borde de su manto..." El abrirse paso en medio de la multitud y tocar el manto de Jesús fue, más que un magno paso de Fe, fue mas bien el primer paso hacia una nueva vida, una que ella añoraba hacía ya 12 años.
La fe de la mujer venció todas las barreras físicas, sociales, espirituales y emocionales que su enfermedad le había provocado. Así como ella se atrevió a tocar el manto de Jesús, nosotros debemos atrevernos a declarar con FE que cualquier tipo de quebranto o atadura no prevalecerá en nuestras vidas. Pues tal vez no podamos tocar el manto de Jesús físicamente pero nuestra FE, si esta puesta en Jesús, si tocará su manto y seremos sanados. No importa el tiempo no importa el quebranto que sea, para DIOS NADA ES IMPOSIBLE.


Siervos del Altísimo: Fe que trasiende el tiempo


La mujer del flujo de sangre
Marcos 5:21-34


La Biblia no nos dice mucho sobre ella, ni siquiera su nombre. Pero si nos dice lo que necesitamos saber para comprenderla. Una mujer, con una enfermedad de flujo de sangre; de acuerdo a las raíces culturales, era considerada impura, poca cosa e indigna de tan siquiera hablarle. Ahora, imagínese el corrompimiento físico, espiritual, social y emocional que esta mujer sufrió por 12 años. Sin dinero, ni hogar, sin cura y quizás con pocas ansias de vivir.
Por: Angélica Pérez

Al escuchar del maestro de ese magnífico sanador, un hombre que andaba por las calles de Jerusalén impactando vidas, perdonando personas e inclusive resucitando muertos. La fe de la mujer creció, imagino como al escuchar de Él seguramente pensó en la sanidad que podría traer a su vida misma. "Si tan solo tocare el borde de su manto..." El abrirse paso en medio de la multitud y tocar el manto de Jesús fue, más que un magno paso de Fe, fue mas bien el primer paso hacia una nueva vida, una que ella añoraba hacía ya 12 años.
La fe de la mujer venció todas las barreras físicas, sociales, espirituales y emocionales que su enfermedad le había provocado. Así como ella se atrevió a tocar el manto de Jesús, nosotros debemos atrevernos a declarar con FE que cualquier tipo de quebranto o atadura no prevalecerá en nuestras vidas. Pues tal vez no podamos tocar el manto de Jesús físicamente pero nuestra FE, si esta puesta en Jesús, si tocará su manto y seremos sanados. No importa el tiempo no importa el quebranto que sea, para DIOS NADA ES IMPOSIBLE.


viernes, 23 de octubre de 2009

Sólo eres tu


Si no eres tu...
La luz de mis caminos
La sombra de mis descansos
El latir de mi corazón
El músico de mis cuerdas,
Y la fuente de mis pensamientos
Vacía estoy y petrificada voy
Respirando por respirar y caminando sin rumbo

Si no eres tu, el alfarero de mi vida
Y tampoco eres la inspiración que me guía
Si de mi vida no eres el único dueño
Y si contigo yo nunca sueño
Entonces vacía estoy y petrificada voy,
Pensando por pensar sin nada para dar

Si tu no eres el centro, yo desvanezco
Si tu no eres la inspiración que me guía
Por siempre viviré perdida
Más siendo tu la luz de mis senderos
Llena estoy, viva voy y gozosa estoy en ti mi Dios




Por: Angélica Pérez

Sólo eres tu


Si no eres tu...
La luz de mis caminos
La sombra de mis descansos
El latir de mi corazón
El músico de mis cuerdas,
Y la fuente de mis pensamientos
Vacía estoy y petrificada voy
Respirando por respirar y caminando sin rumbo

Si no eres tu, el alfarero de mi vida
Y tampoco eres la inspiración que me guía
Si de mi vida no eres el único dueño
Y si contigo yo nunca sueño
Entonces vacía estoy y petrificada voy,
Pensando por pensar sin nada para dar

Si tu no eres el centro, yo desvanezco
Si tu no eres la inspiración que me guía
Por siempre viviré perdida
Más siendo tu la luz de mis senderos
Llena estoy, viva voy y gozosa estoy en ti mi Dios




Por: Angélica Pérez

viernes, 9 de octubre de 2009

Caminando en los pasos de Cristo


Salmos 32:8 "Te haré entender, y te enseñaré el camino que debes andar, sobre tí fijaré mis ojos."

Cuando tenemos problemas solemos agarrarnos de la mano de Jesús y no soltarla, es como un niño que está agarrado de la mano de su mamá y no la suelta hasta llegar a un lugar seguro. Sin embargo una vez pone pie en ese lugar seguro, comienza a explorar y se suelta de la mano de su mamá, quizás para jugar con otros niños o con un juguete. Acaso no hacemos nosotros lo mismo? Cometemos el error de comenzar a ver esos "juguetes" y cosas que nos llaman la atención y nos soltamos de la mano de Jesús para irnos a explorar lugares desconocidos.

Debemos ser cuidadosos con esto puede parecer que por el camino que Jesús nos quiere llevar no es el más atractivo pero es el que nos traerá gozo que no acaba, paz, luz, sabiduría y toda buena dádiva. Santiago 1: 17 dice: "Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación." Encontraremos pruebas y obstáculos en este camino pero serán en esos momentos en los cuales Jesús estará a nuestro lado para levantarnos, ayudarnos a atravesar los obstáculos y salir adelante.

Salmos 25:8b- 9 "Por tanto él enseñará a los pecadores el camino. Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera." Si le permitimos a Cristo guiar nuestros caminos y seguimos sus pasos, llegaremos a la vida eterna y obtendremos la victoria. No permitamos que las tentaciones y las distracciones nos alejen del camino correcto y tampoco nos desanimemos por los obstáculos y pruebas que podemos encontrar en el caminar con Jesús. Después de todo recuerden que luego de cada una de esas pruebas una gran bendición podremos ver.
Por: Angélica Pérez

Caminando en los pasos de Cristo


Salmos 32:8 "Te haré entender, y te enseñaré el camino que debes andar, sobre tí fijaré mis ojos."

Cuando tenemos problemas solemos agarrarnos de la mano de Jesús y no soltarla, es como un niño que está agarrado de la mano de su mamá y no la suelta hasta llegar a un lugar seguro. Sin embargo una vez pone pie en ese lugar seguro, comienza a explorar y se suelta de la mano de su mamá, quizás para jugar con otros niños o con un juguete. Acaso no hacemos nosotros lo mismo? Cometemos el error de comenzar a ver esos "juguetes" y cosas que nos llaman la atención y nos soltamos de la mano de Jesús para irnos a explorar lugares desconocidos.

Debemos ser cuidadosos con esto puede parecer que por el camino que Jesús nos quiere llevar no es el más atractivo pero es el que nos traerá gozo que no acaba, paz, luz, sabiduría y toda buena dádiva. Santiago 1: 17 dice: "Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las luces en el cual no hay mudanza, ni sombra de variación." Encontraremos pruebas y obstáculos en este camino pero serán en esos momentos en los cuales Jesús estará a nuestro lado para levantarnos, ayudarnos a atravesar los obstáculos y salir adelante.

Salmos 25:8b- 9 "Por tanto él enseñará a los pecadores el camino. Encaminará a los humildes por el juicio, y enseñará a los mansos su carrera." Si le permitimos a Cristo guiar nuestros caminos y seguimos sus pasos, llegaremos a la vida eterna y obtendremos la victoria. No permitamos que las tentaciones y las distracciones nos alejen del camino correcto y tampoco nos desanimemos por los obstáculos y pruebas que podemos encontrar en el caminar con Jesús. Después de todo recuerden que luego de cada una de esas pruebas una gran bendición podremos ver.
Por: Angélica Pérez

martes, 6 de octubre de 2009

Mi Vida Junto a Ti

Al despertar me mis sueños puedo ver
Las hermosas obras de arte que sueles hacer
Un bello sol, un cielo sin igual, otro amanecer
Entonces otra vez debo, tu nombre enaltecer

Al sentir el soplo de vida en mí cada mañana
nuevas fuerzas me das para completar mi jornada
Al andar mis pasos diarios no puedo evitar
Contarles a otros lo mucho que te he de amar

Mi vida esta repleta de tus bendiciones,
Y Día a día me usas para tocar los corazones
¿Donde estaría yo sino fuera por tu sacrificio?
Gracias Dios por tu Amado Hijo

Ya llega el cansado y lento atardecer
Es ahí cuando yo vuelvo a recordar
Que una hermosa obra de arte
Al día siguiente Tú harás.


Por: Angélica Pérez

Mi Vida Junto a Ti

Al despertar me mis sueños puedo ver
Las hermosas obras de arte que sueles hacer
Un bello sol, un cielo sin igual, otro amanecer
Entonces otra vez debo, tu nombre enaltecer

Al sentir el soplo de vida en mí cada mañana
nuevas fuerzas me das para completar mi jornada
Al andar mis pasos diarios no puedo evitar
Contarles a otros lo mucho que te he de amar

Mi vida esta repleta de tus bendiciones,
Y Día a día me usas para tocar los corazones
¿Donde estaría yo sino fuera por tu sacrificio?
Gracias Dios por tu Amado Hijo

Ya llega el cansado y lento atardecer
Es ahí cuando yo vuelvo a recordar
Que una hermosa obra de arte
Al día siguiente Tú harás.


Por: Angélica Pérez